En Decoración Alcazaba tenemos una gran variedad de alfombras turcas o kilim turcos y alfombras árabes en general, alfombras persas, etc. Los Kilim son ideales para múltiples estancias y usos, desde el decorado de nuestra cocina, dormitorios, salones o pasillos. Aportan colorido y alegría a cualquier tipo de entorno decorativo, sea decoración árabe u occidental. ¡Envíos en 24h!
¿A quién no le gustan las alfombras ? ¡Quedan tan elegantes! da igual donde las pongas, siempre quedan genial y le dan ese toque que falta a cualquier estancia.
Además, si son alfombras árabes más que mejor, este tipo de alfombras cuentan con una larga tradición, siendo consideradas las más bonitas del mundo. Ya en el siglo VII las tribus bereberes que se asentaron en Marruecos empezaron a tejer estas preciosas alfombras. Las mujeres iban atando a mano la lana de las ovejas de la cordillera del Atlas y hoy en día, dicha técnica artesanal se sigue transmitiendo de madres a hijas.
¿Sabías que las alfombras marroquíes poseen colores y patrones exclusivos? y es que, estas alfombras están hechas a mano por ello todas son únicas, además de que cuentan con dibujos fascinantes como símbolos de amor, de felicidad, de naturaleza...De entre los colores que más destacan en este tipo de alfombras se encuentran, el azul, el rojo, el naranja, el amarillo y el morado, que se se extraen de plantas y de bayas, mientras que el color negro procede de la lana de las ovejas y las cabras.
Las alfombras marroquíes como el kilim se están poniendo de moda en nuestro país y es por ello, por lo que en Decoración Alcazaba hemos traído estas alfombras, las cuales se han convertido en un objeto de decoración muy deseado y sabemos que os encantarán.
El kilim es un tapizado colorido que se utiliza en Turquía y en las alfombras Persas sobre todo, aporta calidez y alegría a nuestros decorados del hogar.
El kilim es un textil de pelaje plano, muy característico tanto de Turquía como de otros países de oriente. El término kilim significa literalmente ''no mezcla colores''. Se dice que es la alfombra más antigua del mundo. Un kilim se diferencia de una alfombra en la técnica de la costura, ya que el kilim, por la metodología de su creación, la realiza el artesano entretejiendo las fibras de lana, creando mosaicos o patrones geométricos tan característicos de este estilo.
Los acabados de los kilims son muy uniformes debido a los entramados de los tejidos de lana. Los patrones que se forman en este tipo de alfombras son generalmente geométricos, ya que facilitan el trabajo manual del artesano con la técnica de tejido de hendidura, que es la empleada en los kilims y los hace tan únicos.
Duraderas y con resistencia, están diseñadas para ser pisadas y transitadas con una frecuencia importante.
Fabricado en Turquía.
Es recomendable limpiarla con agua fría y con jabón natural si es necesario. Aunque se puede secar en secadora a baja temperatura, mejor secar a la sombra, al aire libre, ya que el sol directo puede alterar el colorido de la alfombra.
Si tiene suciedad, restos de productos sólidos sobre el kilim, se puede cepillar con un cepillo suave ambas caras de la alfombra, enjuagándose posteriormente con agua fría.